La nueva moda que triunfa entre los adolescentes son los “vapers” desechables, de usar y tirar, con o sin nicotina, de variedad de colores y sabores: chuches, donuts, algodón de azúcar, helado de fresa, sandía… su precio ronda los 10 euros y, dado que estos cigarrillos electrónicos no están considerados como tabaco, se venden tanto en internet como en estancos y bazares chinos a menores de edad.
Estos cigarrillos electrónicos consisten en un pequeño depósito o cartucho que contiene el líquido (con o sin nicotina), propilenglicol, glicerina, saborizantes y otros compuestos químicos y que, mediante un sistema electrónico con una batería (generalmente recargable) y un atomizador, vaporiza la mezcla. Simulando a los cigarrillos tradicionales, se utiliza inhalando el aerosol producido y emite parte de este aerosol al ambiente.
Su uso se está normalizando entre los jóvenes y se ha generado una falsa percepción de que los vapers sin nicotina no son dañinos para la salud, a diferencia del tabaco. Es cierto que los “vapers” o “vapes” sin nicotina evitan la adicción a la nicotina y todos los efectos secundarios de la misma, pero el gran problema que presentan estos cigarrillos electrónicos hoy en día es su uso, no precisamente por personas que intentan dejar de fumar, sino por adolescentes y jóvenes no fumadores, que ven en estos “vapers” una moda que no tiene repercusiones en su salud. Son una potencial puerta de entrada a la adicción a la nicotina y al consumo de tabaco entre los jóvenes y personas no fumadoras.
Algunos estudios demuestran que vapear con o sin nicotina tiene efectos negativos en el organismo, como, por ejemplo:
- Irritación de la garganta y los pulmones al momento de inhalar el vapor.
- Inflamación en células pulmonares, dada por sustancias como el propilenglicol y la glicerina.
- Al vapear, el calentamiento de la batería produce químicos nocivos como acetaldehído, formaldehido y acroleína. Estas sustancias pueden causar cáncer del pulmón y enfermedades cardiovasculares.
- El vapor cuando es exhalado contiene nicotina, diacetilo, benceno y metales pesados, los cuales pueden causar serias enfermedades pulmonares en quienes no vapean pero están expuestos al vapor.
En definitiva, conviene estar al tanto de esta moda entre los adolescentes, no solo porque los vapers son producto perjudicial para la salud, sino especialmente porque también incentivan el consumo de tabaco en el futuro.
LINKS
https://www.sanidad.gob.es/ciudadanos/proteccionSalud/tabaco/docs/InformeCigarrilloselectronicos.pdf